La salud mental abarca nuestro bienestar en diversos ámbitos, incluyendo el psicológico, el emocional y el social, e influye en nuestros pensamientos, sentimientos y acciones cotidianas. Además, es la encargada de controlar el estrés, entablar relaciones sociales positivas y tomar decisiones que puedan mejorar nuestra calidad de vida. Por lo tanto, es realmente importante cuidarla desde que somos pequeños; pero, lastimosamente, muchas personas no conocen maneras sencillas de hacerlo ni su relevancia por lo que prefieren ignorarla antes que tomar cartas en el asunto.
Sin embargo, si por algún motivo te detuviste a pensar sobre tu salud emocional y uno de tus propósitos de año nuevo fue tener un mejor estilo de vida ¡Este blog es para ti! A continuación te contaremos las principales razones para cuidar tu salud mental desde hoy y tips que te ayudarán a mejorarla en un abrir y cerrar de ojos ¡Sigue leyendo!
Importancia de tener una buena salud mental
Después de dos años de pandemia, la mayoría de personas hemos observado que la salud mental juega un papel crucial en todas las áreas de nuestra vida diaria. Para empezar, esta tiene una estrecha relación con la salud física pues ciertas afecciones mentales (depresión, ansiedad, etc.) pueden aumentar el riesgo de enfermedades como diabetes, hipertensión y otras enfermedades cardíacas y accidentes cardiovasculares.
De igual forma, la salud emocional afecta en gran medida en nuestras relaciones sociales y en la manera en la que aportamos al resto de la comunidad. Sin mencionar que nos permite afrontar el estrés, adaptarnos a los cambios y afrontar las adversidades de la mejor manera posible, trabajar productivamente y alcanzar nuestro potencial al máximo.
¿Cómo puedo cuidar mi salud mental?
El primer paso para cuidar la salud mental en adolescentes y adultos es comprender que hacerlo no implica evitar el estrés a toda costa o ignorar las emociones negativas (tristeza, ira, miedo, etc.). Más bien, consiste en aprender a gestionar de manera eficiente todos los pensamientos y sentimientos que se presenten en nuestra vida cotidiana. Para hacerlo, puedes utilizar los siguientes consejos:
- Realiza actividad física
De seguro has escuchado la famosa frase “Cuerpo sano, mente sana”. Bueno, déjame decirte que este dicho tiene toda la razón ya que realizar actividad física por lo menos 30 minutos cada día, junto a llevar una dieta saludable, trae consigo múltiples beneficios para nuestra salud en general; incluyendo la salud mental. Por un lado, al practicar cualquier deporte nuestro cerebro segrega dopamina, reduce el nivel de actividad fisiológica asociada al estrés, la ansiedad y/o la ira y mejora nuestro estado de ánimo. Mientras, por el otro, nos mantiene en forma y aumenta nuestra autoestima cuando observamos los cambios físicos de nuestro cuerpo. Entonces ¿Qué esperas para inscribirte en las clases de pilates que siempre te han llamado la atención? O, quizás, ¿En los cursos de yoga en las mañanas?
- Dale importancia al sueño
Establecer un horario para dormir y asegurarnos de cumplir con nuestras horas necesarias de descanso (7, 8 horas o más dependiendo de la persona) tiene un impacto positivo en nuestra salud mental. Esto se debe a que el sueño mejora nuestro rendimiento tanto físico como intelectual y reduce la probabilidad de desarrollar problemas psicológicos. Por esto, asegúrate de tener una rutina de noche relajante como bañarte, leer, prender una vela aromática y acostarte. Y, dentro de lo posible, evita la exposición a luces azules (pantallas de dispositivos electrónicos como celulares, computadoras, etc.) por lo menos 30 minutos antes de ir a dormir.
- Practica la gratitud
Ser agradecidos por las cosas buenas en nuestra vida, desde las más pequeñas hasta las más grandes, es de gran ayuda para cuidar nuestra salud mental. La gratitud nos permite darnos cuenta de que la vida es hermosa y tiene muchas cosas por ofrecer. Por ende, vamos a ser más felices por apreciar los pequeños detalles. Para hacerlo, te recomendamos que antes de irte a acostar cada noche te tomes un tiempo para pensar y reflexionar sobre tu día. Así, podrás agradecer de manera oral o escrita por todo lo que te sacó, aunque sea, una pequeña sonrisa o por las cosas que te hacen feliz en general. Entonces, puedes ser agradecido por situaciones que van desde que el día fue soleado y no llovió hasta por tener contigo a todos tus seres queridos.
- Come bien
Llevar una dieta saludable y balanceada mantiene a nuestro cuerpo y mente sanos por lo que nuestro bienestar en general aumentará. Al elegir correctamente los alimentos que ingerimos y limitar el consumo excesivo de grasas, azúcares y comida chatarra en general, evitamos enfermedades como diabetes, obesidad, entre otras; mientras, paralelamente, le brindamos a nuestro cerebro fuentes de energía idóneas. Algunas de las comidas más beneficiosas que debes incluir en tu dieta son los productos frescos como frutas y verduras, los pescados azules, proteína proveniente de carnes blancas como pollo y pavo y grasas saludables que puedes encontrar en frutos secos u otros alimentos. Eso sí, asegúrate de acudir a un nutriólogo si es que piensas cambiar tu dieta pues hacerlo de forma drástica puede influir negativamente en tu salud.
- Mantén una actitud positiva
Muchas veces nuestra salud mental se ve afectada debido a que dejamos que factores negativos externos influyan en ella. Por esto, debemos asegurarnos de contrarrestar esta clase de pensamientos o situaciones manteniéndonos positivos y evitar que condicionen o controlen nuestra vida. La mayoría de personas tiene la idea errónea de que mantenerse positivo significa ignorar o suprimir las emociones negativas como la tristeza o el enojo. Sin embargo, esto no puede estar más lejos de la realidad ya que lo que se busca es experimentar las emociones perjudiciales y dejarlas pasar con el fin de que no nos superen. De la misma manera, es importante saber cuándo tomar un descanso de la información negativa para no caer en chismes, discusiones y tampoco comparar nuestra vida con la de los demás.
- Haz nuevos amigos y conéctate con los demás
Las personas somos seres sociales por lo que es importante mantener relaciones fuertes y saludables con los demás si queremos tener una buena salud emocional. La socialización es esencial debido a que nos brinda apoyo útil para manejar el estrés, amplía nuestra visión del mundo y de la gente en general, desarrolla nuestras habilidades de comunicación, plática y empatía, entre otras cosas. Sin mencionar que el involucrarnos con nuestra familia, amigos o barrio y formar parte de una comunidad nos permite sentirnos aceptados y valiosos.
Nota: Si tienes dificultad para socializar y hacer amigos puedes soltarte poco a poco con las personas de tu círculo social o pedirles que te ayuden a conocer personas con los mismos intereses que tú. Te sorprenderá todas las conexiones y relaciones que puedes formar.
- Practica meditación
La meditación es una práctica de mente y cuerpo que consiste en enfocar tu atención y conciencia en un tema en específico. Esta es realmente útil debido a que, una vez que controlas y dominas tus pensamientos, ya nada podrá atormentarte ni atentar contra tu salud mental. Existen varios tipos de meditaciones como la meditación trascendental y la meditación plena por lo que debes escoger la que más se adecúe a tus necesidades. Eso sí, para hacerla asegúrate de contar con un lugar tranquilo con la menor cantidad de distracciones posibles, mantener posturas cómodas y específicas y tener una actitud abierta. Recuerda que debes permitir que tus ideas vayan y vengan de forma natural y sin juzgarlas.
- Encuentra un objetivo de vida
Una de las cosas que atenta en mayor medida contra nuestra salud mental es la falta de objetivos. Entonces, es primordial que te plantees metas a corto y largo plazo si estás en proceso de recuperación de algún trastorno relacionado a la mente o quieres cuidar tu salud mental. Al hacerlo, encontrarás motivación para seguir adelante y te comprometerás a hacer todo lo necesario (dentro de lo sano y razonable) para alcanzarlas. Sin mencionar que adquirirás un hábito y, probablemente, estos te ayudarán a ser una persona más responsable tanto con tus tareas como contigo mismo.
- Busca ayuda si es necesario
Hay veces en las que, por más que lo intentemos, es imposible poner en práctica estos consejos sin un poco de ayuda o apoyo. Es fundamental que nos demos cuenta de cuándo comunicar nuestras necesidades o pensamientos para poder seguir adelante. Recuerda que puedes empezar por tus amistades, familiares y otras personas de confianza hasta que decidas ir con profesionales ¡Te aseguramos que te cambiarán la vida y te ayudarán a cuidar tu salud mental con técnicas personalizadas para ti!
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