Cuando una mujer decide adentrarse en la aventura de la maternidad, son muchas las preguntas, los miedos y las inseguridades que surgen a lo largo de los nueve meses.
¿Cómo se desarrollará mi embarazo? ¿De qué manera he de prepararme para el parto? ¿Todo saldrá bien? ¿Qué complicaciones pueden surgir y cómo evitarlas? En fin, son un sinnúmero de dudas que llegarán inmediatamente a nuestra cabeza.
Este momento preocupa a todos, en especial a quienes seremos padres, pero también preocupará a la familia, amigos, y a profesionales que intervienen en este proceso. Todos deseamos que el embarazo transcurra de una manera fácil, rápida, natural y satisfactoria. Lastimosamente no podemos controlar los factores que intervienen en un parto; sin embargo, podemos llegar a él en las mejores condiciones posibles, tanto físicas como psicológicas, facilitándonos el proceso.
Cuando estamos a semanas de la llegada de nuestro bebé, nuestro tiempo libre se verá limitado un poco. Por eso, podemos aprovechar la recta final de nuestro embarazo, ultimando detalles y prepararnos para el parto. Recuerda que durante todo el embarazo debes llevar una vida sana y saludable. Empezando por una dieta equilibrada y libre de sustancias dañinas como el alcohol, el cigarrillo, etc. Pero sobre todo debes tener una vida tranquila y relajada por lo que puedes revisar como controlar mejor tus emociones para estar más calmada aquí.
Es importante contar con la experiencia de otras madres que hayan pasado por este proceso porque, aunque cada embarazo es y será único, existen situaciones comunes. Las vivencias cercanas y consejos que nos puedan aportar nos ayudarán mucho y nos harán sentir mejor y tranquilas para cuando llegue el momento del parto.
A continuación, te daré 10 consejos para lograr un parto feliz y prepararnos para el parto de una manera tranquila y fácil:
Camina a diario:
Uno de los ejercicios más comunes para prepararnos para el parto y facilitarlo es, simplemente, caminar. No hace falta que estés en forma para comenzar a caminar. Las caminatas son buenas antes, durante y después del embarazo. Al estar en movimiento, la cabeza del bebé hace presión contra el cuello uterino, estimulando la producción de oxitocina, que es la que provoca el inicio del parto. Si el bebé no ha encajado en la pelvis o está muy arriba, caminar ayudara a ubicarlo en la posición correcta, lo que facilitara el alumbramiento. Este efecto se potencia si subes escaleras. Recuerda que debes hacerlo con precaución, tómate del pasamano y ve a paso lento pero sostenido. Olvídate de acelerar la marcha y provocar caídas innecesarias.
Prepara la maleta para ti y él bebé:
Si hay algo que debes tener listo en el momento del parto es sin duda todo aquello que necesitarás llevar al hospital o clínica. Debes tener en cuenta que tu bebé puede llegar antes de lo previsto y, por eso, es recomendable tener la maleta preparada a partir del séptimo mes. Mete pañales, unos bodies de manga larga y abierta por delante y algo de ropa para cuando vengan las visitas. Incluso puedes incluir cremas, lociones atópicas, etc. No olvides lo tuyo, como camisones cortos y abiertos por delante para facilitar la lactancia, una bata, zapatillas, dos sujetadores de lactancia y discos absorbentes para tu leche.
Ultima los detalles de la habitación del bebé:
La cuna, el mueble cambiador y hasta los juguetes deben estar listo antes de la llegada del bebé. Recuerda que tu bebé necesita un espacio confortable para dormir y jugar y ahora es el momento de dotarlo de todo lo necesario. Ten en cuenta que su habitación deberá estar decorada con colores cálidos, tener una temperatura agradable y luz directa. Si deseas, puedes poner un sillón de lactancia, ya que será muy cómodo para los primeros meses.
Acude a las clases de Educación Maternal:
Los conocimientos e información que aportan y la posibilidad de resolver dudas, disminuye la ansiedad y el miedo del día del parto. Las mujeres que han acudido a clases maternales están más preparadas ya que pueden anticipar los distintos cambios que ocurren a lo largo de la gestación. Además, conocen lo que ocurrirá a lo largo del parto, minimizando así los temores que despiertan la última fase del embarazo.
Infórmate sobre la lactancia:
Lo más importante es decidir qué tipo de lactancia quieres para tu hijo: lactancia materna o artificial. Debes comentarlo con tu ginecólogo/a después del alumbramiento para tomar las medidas necesarias en cada caso. Toma en cuenta que La Organización Mundial de la Salud recomienda leche materna de manera exclusiva durante los primeros 6 meses, combinada con otros alimentos hasta los dos años; esto se debe a los innumerables beneficios que aporta a los más pequeños. Si hay circunstancias que te obligan a alimentar a tu bebé con biberón puedes optar por dárselo con leche materna.
Aprende a relajarte:
Sería adecuado aprender y practicar técnicas de relajación para aplicarlas durante el momento de la dilatación y del parto o incluso en los días previos. El miedo y la ansiedad aumentan el dolor, por lo que es recomendable evitarlos y para ayudarte a hacerlo puedes escuchar música clásica. También es bueno tomar duchas de agua caliente o masajes en piernas y pies, entre otras muchas opciones. Esto va a ayudarte a controlar la ansiedad y será más fácil canalizar el dolor.
Recibe Masajes:
El masaje ayuda a relajarte y a liberar endorfinas, lo que te permite sentirte mejor. Puedes pedir ayuda para que te realicen un masaje suave en la base de la espalda, porque estos servirán cuando estés en labor de parto. Recibir masajes en las piernas y pies, aliviará mucho la hinchazón y facilitará la circulación. Así que mientras llega el momento, te ayudarán a relajarte y bajar la ansiedad, que puede hacer más lento el trabajo de parto.
Evita quedarte inmóvil:
Una de las peores cosas para relajarte es quedarte inmóvil en la cama. Moverte libremente, deambular por la casa o sala de partos, o usar una pelota de fitness para balancear la pelvis te ayudará a afrontar mejor la sensación dolorosa. Si te apetece, incluso bailar, es un buen método natural para facilitar el parto. Los movimientos de la madre ayudan a que el bebé se coloque y con su propio peso, contribuya a ablandar el cuello del útero para provocar el nacimiento. Además, te lo pasas bien, te distrae y te ayuda a relajarte.
Ejercicios de respiración:
A medida que se acerca la fecha estimada del parto, aprende y practica técnicas de respiración controlada para el manejo o canalización del dolor durante el parto.
Puedes probar la respiración abdominal (Mientras inhalas, ensanchas el abdomen hacia afuera; y al exhalar, dejas que se hunda y se relaje el abdomen). O la respiración jadeante (Cuando las contracciones se vuelven más intensas, exhalas por la boca de entrecortadamente siguiendo un patrón de “jadeo y soplido”, a unos 6 ciclos por minuto)
Elige quién te acompañará en el parto:
El padre suele ser el elegido para acompañar a la futura mamá en el momento del parto. Sin embargo, en algunos casos no es posible. Por ejemplo, cuando tienes más hijos pequeños y no tienes con quien dejarlos es posible que tu pareja no pueda estar contigo en el parto. Pero en estos casos, puedes recurrir a una persona de confianza que puede ser tu mamá, hermana, prima, amiga, etc. Solo ten en cuenta que necesitarás a tu lado alguien que te trasmita mucha tranquilidad.
Durante todo el embarazo, desde la primera semana hasta la última, es importante que como mujer te cuides para que puedas cuidar de tu bebé. A pesar de que constantemente se deberán adoptar precauciones y estar pendiente de que lo que la madre hace –o no hace– podría afectar al bebé. Luego vienen momentos gratificantes pues muchas mujeres que han atravesado este proceso aseguran que nunca se han sentido tan sanas como cuando estuvieron embarazadas.
Siempre debemos tener presente que cada mujer y cada parto son diferentes. Es por eso que nuestro consejo será que te informes lo más extensamente posible acerca de todo el proceso del parto. Esto te aportará tranquilidad, seguridad y confianza que son los sentimientos más valiosos en esos momentos especiales. Con todo ello, tendrás una vivencia más realista y placentera.
Prepararnos para el parto es algo que debemos hacer con antelación para no pasar nada por alto. Esperamos que estos consejos sean de utilidad para tu preparación para el parto y que esto te ayude a simplificarte la vida.
En Tomatis Ecuador nos preocupamos por tu bienestar así que no creas que estás sola en este proceso. Tenemos métodos y ejercicios para canalización del dolor y también podremos enseñarte sobre los ejercicios de respiración que te facilitarán mucho este camino.
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