La depresión es una enfermedad mental que puede afectar a cualquier persona, independientemente de su edad, género o estatus social. Por esto, es fundamental que prestemos especial atención a las conductas extrañas de nuestras personas cercanas y actuemos desde el primer signo de alerta, pero ¿Qué podemos hacer para ayudarlos?
Es normal que al enterarnos de que un amigo o familiar está lidiando con la depresión, nos sintamos impotentes y no sepamos exactamente cómo apoyarlos. Sin embargo, existen muchas formas en las que nuestros seres queridos pueden combatir la depresión con nuestra ayuda ¿Quieres conocerlas? ¡Sigue leyendo!
Antes que todo… ¿Qué es la depresión?
La depresión es un trastorno del estado de ánimo que se caracteriza por sentimientos persistentes de tristeza, desesperanza, falta de interés o placer en las actividades cotidianas y una serie de síntomas físicos y cognitivos.
Esta puede ser causada por varios factores, como la genética, los cambios hormonales, la exposición a situaciones estresantes o traumáticas, y ciertas enfermedades médicas; y, en la mayoría de casos, la combinación de estos elementos influyen en su gravedad y en la manera que debe ser tratada.
El tratamiento de la depresión puede incluir medicamentos, terapia psicológica, cambios en el estilo de vida y apoyo social. Es sumamente importante buscar ayuda si te sientes depresivo o si alguien que conoces muestra signos de este trastorno, ya que cuando no es tratado puede empeorar y afectar seriamente la calidad de vida de una persona.
¿Cuáles son los síntomas de depresión?
Los síntomas de depresión pueden variar dependiendo de cada persona, pero algunos de los más comunes incluyen:
- Sentimientos persistentes de tristeza o vacío.
- Pérdida de interés en actividades que antes eran placenteras.
- Sentimientos de inutilidad o culpa excesiva.
- Fatiga y falta de energía.
- Dificultad para concentrarse, recordar detalles y tomar decisiones.
- Insomnio o hipersomnia (dormir demasiado).
- Cambios en el apetito, con aumento o disminución del peso.
- Pensamientos de muerte o suicidio.
- Irritabilidad y ansiedad.
- Dificultad para controlar las emociones o los cambios de humor.
Es fundamental señalar que los síntomas de depresión previamente mencionados pueden variar en intensidad y duración, además de que muchos otros aparecen en etapas más avanzadas. Nota: Si has identificado estos comportamientos en ti o en una persona cercana durante un período prolongado de tiempo, es recomendable que te comuniques con tu/su profesional de la salud mental de confianza para recibir ayuda personalizada.
¿Cómo ayudar a mi amigo/familiar con depresión?
Quizás has notado que tu hermano se encuentra deprimido luego de terminar su relación amorosa o, quizás, que tu mejor amiga se ha convertido en una persona depresiva después de un suceso fuerte en su vida. Bueno, si bien es cierto que no podemos realizar el mismo trabajo que un profesional de la salud mental, si podemos ser de gran ayuda para nuestros seres queridos si padecen de este trastorno. Para hacerlo, presta atención a los siguientes consejos:
Escucha y apoya
Una de las mejores cosas que puedes hacer es escuchar a la persona depresiva y brindarle apoyo emocional. La depresión suele generar sentimientos de aislamiento y soledad, por lo que es importante que sepa que alguien está allí para ayudarla. A menudo, simplemente estar presente y escuchar sin juzgar puede ser un gran alivio para alguien que está lidiando con este duro trastorno. Así que no dudes en hacerle saber que te tiene en su vida, que la entiendes y que te preocupas por ella. Además, no te olvides de preguntarle regularmente cómo se siente y si puedes ayudarla en algo.
Incentívala a mantener una rutina diaria saludable
Hay que tener presente que la depresión y ansiedad drenan la mayoría de la motivación y la energía diaria de quienes las padecen. Por esto, es primordial ayudar a tu persona cercana a mantener una rutina saludable, incluyendo una dieta balanceada, ejercicio regular y suficiente sueño. En muchos casos, la estructura y la disciplina son útiles para mejorar e incluso eliminar los episodios depresivos, permitiendo que la persona en cuestión se sienta mejor. Entonces, ayúdala a establecer metas realistas y alcanzables para su día a día, y anímala a que celebre sus logros, hasta los más pequeños como tomar una ducha, acabarse su plato de comida, sacar a su mascota a pasear, etc.
Sé paciente y comprensivo
Mantenernos pacientes y comprensivos es esencial al intentar ayudar a alguien que se siente deprimido regularmente o que ha sido diagnosticado con depresión, pues estas cualidades nos permitirán construir una relación de confianza y apoyo. Para empezar, es fundamental saber que la depresión es un trastorno mental complejo con muchas causas por lo que puede tomar un tiempo encontrar una solución viable; y, por ende, no debemos presionar a la persona, ni cuestionar su proceso. De igual forma, hay que ser sensatos al momento de interactuar con ella y crear una conexión que le permita sentirse cómoda para compartir sus sentimientos y pensamientos. Sin mencionar que en ningún caso hay que acudir a la estigmatización ni juzgarla por su condición; más bien, es primordial actuar como su soporte y apoyo desde el inicio.
Motívala a unirse a grupos de apoyo
Como resultado de la estigmatización que la sociedad le ha dado a la depresión, es normal que varias personas le resten importancia o prefieran ocultar que la padecen. Sin embargo, esto no solo aporta a que las falsas creencias incrementen, sino que también perjudica en gran medida la salud mental de los involucrados. Cuando una persona con depresión se siente juzgada o criticada por su condición, es menos probable que busque ayuda. Así que, si es que no podemos entenderla por nosotros mismos, una gran idea es motivarla a unirse a grupos de apoyo de personas con este trastorno. Sentirse parte de una comunidad, poder expresarse sin miedo e identificarse con las vivencias de otros le resultará reconfortante y motivador.
Ofrece ayuda práctica
Como mencionamos anteriormente, la depresión es un trastorno que en muchos casos afecta la rutina y la vida diaria de quienes la padecen. Por esto, realizar actividades prácticas para nuestros seres queridos que se encuentran deprimidos es una gran manera de apoyarlos y hacerles saber que estamos allí para ellos. Nuestra ayuda debe empezar desde cosas necesarias en la vida cotidiana como tender la cama, arreglar el cuarto o ir a hacer las compras pues, aunque sean actividades sencillas, muchas veces se dejan de hacer por la falta de ánimo.
Comparte tus vivencias y experiencias
Cuando hablamos de compartir nuestras vivencias y experiencias no nos referimos a intentar ser el protagonista o minimizar los sentimientos de la persona a la que vamos a ayudar. Por el contrario, contarles momentos de nuestra vida en los que nos sentimos tristes o abrumados y cómo lo superamos podrá ser útil para hacerles saber que no están solos en su lucha y proporcionarles un sentido de conexión. Eso sí, asegúrate de utilizar las palabras correctas y, por más pequeño que te parezca su problema, no emplees frases que denoten una exigencia como “¿Por eso estás así? Tranquilo”, “No es tan grave, intenta animarte”, etc.
Anímala a buscar ayuda profesional
Es importante que la persona con depresión reciba atención médica, tanto para conocer su estado mental como para brindarle la ayuda adecuada según sus necesidades. Si aún no ha sido diagnosticada, anímala a hablar con un médico o un profesional de la salud mental; y, si ya ha sido diagnosticada, asegúrate de que esté recibiendo el tratamiento correcto y que siga las recomendaciones dadas. La depresión es una enfermedad seria que, en la mayoría de casos, requiere tratamiento profesional e incluso medicamentos para promover la producción de serotonina cuando esta es el resultado de un factor biológico.
Practica la autocompasión
Ser el cuidador de una persona con depresión puede llegar a ser emocionalmente agotador. Por este motivo, es importante que practiques la autocompasión y te cuides a ti mismo y a tu energía. Asegúrate de tomarte tu tiempo para hacer cosas que disfrutas, como leer un libro o ver una película. De igual forma, puedes buscar apoyo de amigos o familiares y, si es que esto no es útil, considera hablar con un profesional de la salud mental que te ayude a sentirte menos abrumado y te brinde las herramientas necesarias para evitar el desgaste emocional.
Creo que tengo/que alguien cercano a mi tiene depresión ¿Dónde puedo encontrar ayuda?
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